Si Dios me perdona, entonces estoy verdaderamente hecho de vergüenza. Que mejor forma de arrepentimiento que sufrir? No estoy vivo si no estoy siendo castigado. No estoy vivo si no le tengo verdadero miedo a Dios. Si Dios me pide que me quite la vida, lo haré. Si Dios me hubiera condenado a muerte, lo aceptaría. Soy consciente de que no soy diferente al hombre. Todos somos humanos, no monos. Somos humanos y somos conscientes. Por lo tanto, conocemos el significado del sufrimiento. Tengo miedo al pecado porque soy mortal, pero no soy más que un hipócrita. Los que temen al pecado se temen a sí mismos. Avaricia, gula, lujuria? El pecado no se puede justificar, y yo estoy lleno de el. La especie humana deriva del pecado. Pedimos perdón a Dios, pero Dios es solo fe. Buscamos la fe en lo que hemos mancillado. Nos castigamos a nosotros mismos con lo que hemos causado. Me perdonará Dios a pesar de todo? Puedo aceptar la muerte, pero le tengo miedo. Porque no soy diferente a un hombre. Soy un pecador. Si muero, espero ir al infierno. Pero si no he pecado, me llevarán al cielo? Es difícil creer que exista un lugar llamado cielo. Porque soy un hombre y no un mono. Estoy hecho para pecar y estoy hecho para arrepentirme. Se me ha dado una vida para sufrir bajo las lecciones que Dios me ha encomendado. Un mono es un ser vivo, pero un mono no es consciente de un concepto llamado Dios! Pero yo soy un humano y no un mono. Soy objeto de castigo y deseo la libertad. Ser libre de este cuerpo que se me ha dado y que yo no he elegido. Pero realmente merezco otra oportunidad si ni siquiera reconozco mi papel? Creo en Dios porque soy pobre! Soy un alma indefensa que necesita salvación. Pecar es la única respuesta natural para un ser como yo. Dios, querido Dios. Tengo mucho miedo de quién soy. Soy un ser vergonzoso. No puedo aceptar tal castigo y no puedo aceptar quién soy realmente. Ponme en mi lugar y dime que soy un humano, no un mono.